Exposiciones

Arqueta japonesa estilo Namban (c. 1600-1630) y arqueta virreinal peruana de barniz de Pasto (segunda mitad del siglo XVII)

Arqueta japonesa estilo Namban (c. 1600-1630) y arqueta virreinal peruana de barniz de Pasto (segunda mitad del siglo XVII)

Programa La Obra invitada

Del 8 de noviembre de 2016 al 5 de febrero de 2017

El Programa La Obra invitada tiene como misión traer al Museo de Bellas Artes de Asturias durante un periodo de tres meses destacadas obras procedentes de coleccionistas particulares o de otras instituciones nacionales e internacionales que contribuyan a reforzar el discurso de la colección permanente, bien porque permitan profundizar en aspectos ya contemplados por la colección, bien porque permitan cubrir lagunas que en ella puedan detectarse.

En este caso, la presencia será doble, al exponerse no una obra sino dos, procedentes ambas de sendas colecciones particulares y las dos inéditas. Se trata de una Arqueta japonesa estilo Namban, datada hacia 1600-1630, y de una Arqueta virreinal peruana de barniz de Pasto, realizada en la segunda mitad del siglo XVII.

Hace aproximadamente cuatro siglos se elaboró en Japón un tipo de objetos lacados llamados “laca Namban” destinados exclusivamente a los primeros europeos que comerciaron con dicho país, que fueron los portugueses y españoles. Eran pequeños muebles, sobre todo arcas y arquetas, decorados intensamente con motivos dorados y nácar ajustándose al gusto de los clientes. Una parte importante de ellos viajaron a Manila y posteriormente el Galeón de Manila los transportaba a Nueva España, y desde allí se distribuían por América virreinal y España, dejando influencias en las artes americanas. Así se desarrolló en el virreinato de Perú un arte llamado “barniz de Pasto”, que comparte características con la laca Namban.

Arqueta japonesa estilo Namban

Arqueta japonesa estilo Namban, c. 1600-1630, colección particular

Arqueta virreinal peruana

Arqueta virreinal peruana de barniz de Pasto, segunda mitad del siglo XVII, colección particular



Las dos obras invitadas, una arqueta de laca Namban y otra de barniz de Pasto son claros testigos de este interesante intercambio cultural. La Arqueta japonesa estilo Namban es una caja prismática de madera ligera con tapa en forma de medio cañón, decorada toda ella con varias capas de laca japonesa urushi de color negro sobre la que se desarrolla una decoración bastante tupida a base de sencillas plantas, característica habitual del estilo Namban. La decoración está realizada mediante la combinación de distintas técnicas, como la de maki-e plano, que consiste en espolvorear finas partículas de oro o plata sobre los dibujos realizados con la laca urushi fresca, la cual sirve de adhesivo; el harigaki, que consiste en rascar con una herramienta puntiaguda finas líneas después de realizar el maki-e cuando la laca está aún fresca y no consolidada y, por último, el tsukegaki, por medio de la cual se añade con un pincel fino detalles como los nervios o pistilos de las flores. En cuanto a la Arqueta virreinal peruana de barniz de Pasto, también de cuerpo prismático y tapa en forma de bóveda de cañón, está elaborada con el barniz de Pasto, sin relieve, sobre madera y superponiéndose finísimas láminas semitransparentes obtenidas de la resina de mopa-mopa. Su decoración, muy rica, es una verdadera fusión de motivos autóctonos americanos, asiáticos y eruditos llegados de España. En cuanto a la técnica, aparte de aplicarse una rica gama cromática, se recurre a insertar finas láminas de plata batida entre las láminas vegetales, las cuales, combinadas con la lámina superpuesta de distintos colores, crean un intenso brillo sumamente atractivo. Cinco caras de la arqueta están decoradas tupidamente con elementos vegetales, animales y figuras humanas con una disposición más o menos simétrica sobre un fondo negro. Bandas de color crema decoradas con la alternancia de ramilletes y botones florales recorren por los bordes formando marcos. Los contornos de los motivos decorativos y sus detalles están realizados adhiriéndose finísimos cordones o hilos de mopa-mopa.