ciclos de cine
28 de febrero de 2024, 18:00
6 de marzo de 2024, 18:00
20 de marzo de 2024, 18:00
27 de marzo de 2024, 18:00
“Una película nunca es realmente buena a menos que la cámara sea un ojo en la cabeza de un poeta”
Akira Kurosawa
Uno de los rasgos que podríamos destacar como característicos en la obra de Kurosawa son sus reconocidas preferencias por autores occidentales como Dostoievski o Shakespeare, incluso también autores cercanos al género negro como Ed McBain o George Simenon. Este rastro de cultura occidental se puede observar asimismo en la influencia que tiene el western en su cine y cómo, a su vez, él a influenciado un género tan occidental como este. Curioso viaje de ida y vuelta que ejemplifica esa simbiosis entre Japón y Occidente que se puede apreciar a lo largo de su filmografía. El maestro japonés inició su trabajo como director de películas en el año 1943 cuando la Segunda Guerra mundial se encontraba en su apogeo. Japón atraviesa uno de los momentos más delicados de su historia y Kurosawa se convierte en testigo de esa época, de los años posteriores y de las consecuencias de este conflicto en la sociedad japonesa. La vocación inicial del cineasta es la de pintor, De joven estuvo a punto de matricularse en la escuela de Bellas Artes, pero finalmente decide encarar una formación más alejada de lo académico. Esta pasión por la pintura se puede apreciar en toda su obra a través de la manera en la que encuadra sus imágenes. El manejo de la luz y de la sombra, unido a los movimientos de cámara y de los propios personajes dentro del cuadro, contienen una plasticidad propia cercana a lo pictórico. Cuando el color llega a su cine, la paleta del cineasta cambia empleándolo para dar forma a los sentimientos, a las emociones de una manera casi expresionista. Siempre ajustada a la narración de cada película, elaborando imágenes que son casi pinturas en movimiento.
Lugar: salón de actos del Ilustre Colegio de Abogados de Oviedo | Entrada libre has completar aforo
Coordinan: Pablo de María / Alfonso Palacio / Sara Moro